El proyecto de Caravana por la Paz, bajo el lema “Alimenta una esperanza”, consiste fundamentalmente en recoger alimentos, medicinas, ropa y material escolar y enviarlos mediante vehículos a los campamentos de refugiados saharauis. El esfuerzo de Andalucía se traduce en más de 1 millón de kilos aproximadamente, transportados en unos 50 traílers y camiones. La campaña se inicia en el mes de octubre y acaba en abril, normalmente la realización de este proyecto transcurre a lo largo de siete meses.
El primer dato que hay que destacar a la hora de presentar el emplazamiento de la situación geográfica del Sahara Occidental y de los campamentos de refugiados saharauis en la Hammada de Tindouf es el de que se trata de un territorio en litigio y que según la Comunidad Internacional representada por su máximo órgano, esto es, la Asamblea General de Las Naciones Unidas, no tiene un legítimo poseedor por el momento hasta que no se celebre un referéndum para la determinación de la soberanía sobre el territorio. Este hecho es fundamental a la hora de presentar el lugar dado que va a condicionar la propia situación de las infraestructuras al no poder llevarse a cabo inversiones en importantes obras por tratarse de una situación de provisionalidad que, por otra parte, se extiende desde hace 35 años. Por tanto, esto influirá directamente en la construcción de carreteras y en la unión por éstas de los diferentes campamentos, condicionando así nuestro trabajo a la hora de transportar los alimentos y demás materiales.
La subsistencia alimenticia en los campamentos de refugiados saharauis depende prácticamente en su totalidad de la ayuda exterior. Desde 1975 diversas agencias humanitarias internacionales oficiales, entre los que destacan el Alto Comisionado de Naciones Unidas (ACNUR), Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Oficina humanitaria de la Comunidad Europea (ECHO) y el Programa Mundial de alimentos (PAM), proporcionan alimentos a la población refugiada, mediante envíos de: arroz, aceite, legumbres, harina, leche en polvo, azúcar, etc. Alimentos que no siempre llegan con regularidad ni en la cantidad precisa, dándose situaciones de carencia y retraso importantes.
Tratando de reducir la dependencia exterior, las autoridades saharauis, a través del Ministerio de Desarrollo Económico de la R.A.S.D. y en colaboración con organismos y ONGs internacionales, han impulsado diversos proyectos para lograr el autoabastecimiento sobre todo de productos frescos. Así se pusieron en cultivo más de 100 Ha. de terreno, se construyó una granja avícola, ovina y de camellas lecheras.